¿Cómo podemos pintar ahora esta pintura de cuerpos?

5 de abril de 1994: día lluvioso. Sobre todo, no trabajes hoy. Te sumergirías en el color. Reserva el negro para la luz, y el fotograma para el gesto, y el gesto para la búsqueda de formas. Perdido. Aparta lo pesado de lo ligero, y deja que pese con toda la ausencia de la carne tocada... ¿Pero por quién?

Muy atrás, todavía imagino, de este lado de los escombros de lo íntimo, los restos de los siglos donde la verdad estuvo en el centro del cuadro. ¿Nostalgia?

Dos paneles se unen en el borde como si, desde este centro, todavía estuviera esperando que se abriera – ¿o sufriera? – y la boca sombría se cierra.

Catálogo MAC 2000, 1994